La pandemia de COVID-19 destacó la ineludible necesidad de las empresas de transformarse digitalmente y de recurrir a la interconectividad para redefinir sus esquemas laborales. Se trata de un cambio clave no solo por la emergencia sanitaria, sino también por las nuevas tendencias del mercado, en las que la calidad de los productos y servicios ya no resulta determinante.
Aunque es verdad que la pandemia no creo la transformación digital, pues muchas compañías ya habían implementado sistemas de interconectividad y teletrabajo, sí es cierto que esta aceleró los procesos. Cientos de organizaciones tuvieron que implementar oficinas virtuales de tal forma que las operaciones no experimentaran interrupciones importantes.
Como ya lo hemos explicado en este blog, el sector educativo se vio afectado de la misma manera y los cambios fueron tan radicales que muchos expertos prevén que la enseñanza tradicional nunca volverá a ser la misma. Algunas predicciones moderadas pospandémicas sugieren que los beneficios de la interconectividad impulsarán el desarrollo de sistemas híbridos, es decir, que se alternará entre clases presenciales y remotas, mientras que otras, menos mesuradas, apuntan que las experiencias e-learning desplazarán por completo a la escuela tradicional en los próximos años.
Transformación digital, pieza clave de la educación y los negocios del futuro
La implementación de las nuevas tecnologías como el internet inalámbrico, los dispositivos, las aplicaciones, la inteligencia artificial (IA), la realidad extendida (RE), el internet de las cosas (IoT, por sus siglas en inglés), entre otras, ha permitido simplificar cada uno de los procesos internos y externos de las empresas. Por otro lado, en la educación se quebrantó la brecha entre los límites del aprendizaje y conocimiento a través de la modalidad de enseñanza virtual.
Es innegable que la transformación digital no es una simple moda, sino un nuevo enfoque que busca repensar los modelos de negocio y el valor que se entrega a los clientes a través de una perspectiva más moderna y humana. La digitalización permitirá mejorar la experiencia del cliente, crear nuevas ventajas competitivas, analizar datos, generar una cultura organizacional colaborativa e impulsar el teletrabajo.
En cuanto al sector educativo, la digitalización traerá un conjunto de nuevas oportunidades, mayor desarrollo tecnológico, mayor preparación profesional en el uso de las tecnologías, además de que permitirá crear nuevos y mejores productos a través del aumento de la calidad de los contenidos y de la personalización de las experiencias educativas.
Desde ese punto de vista, la interconectividad ha permitido que las organizaciones tanto empresariales como educativas conviertan los datos en conocimiento, incorporen nuevos canales de comunicación, fidelicen clientes a través de mecanismos innovadores y digitalicen la red comercial. El teletrabajo y el e-learning demuestran el poder de alcance de esta nueva era, en la cual se busca desarrollar una cultura capaz e interconectada.
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